Habacuc 3:2
Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, En medio de los tiempos hazla conocer.
600 a.C. - Su nombre significa ceñir, ser ceñido y fortalecido por Dios. En su tiempo, Judá vivió un período en que el país descendido de las alturas de las reformas de Josías hasta las profundidades de los abusos que sufrían sus habitantes, junto con medidas opresivas hacia los pobres y el colapso del sistema legal.
Introducción
Alguien preguntó una vez ¿Por qué hablan tanto de Avivamiento? y el pastor le respondió: ¡Porque es necesario hablar de Avivamiento!.
Un avivamiento- esto es algo que nuestras iglesias necesitan desesperadamente, y no es otra cosa que un despertar espiritual. Es la acción provocada por el Espíritu Santo para dar nuevas fuerzas, vigor para animar y atizar el fuego, dando así viveza en las almas de los hijos de Dios. Un poder, una unción que nos lleva a estar locamente enamorados de Cristo el Señor.
Un avivamiento espiritual es la necesidad de la Iglesia para cumplir la gran comisión. Pablo le dice a Timoteo “Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos” (2ª Tim.1:6).
Es un desafío para todos nosotros para que dejemos a Dios tratar con nuestra vida y con nuestro carácter. Para que podamos estar libres para tocar su presencia y ser restaurados, para recibir del Señor las estrategias y ser parte del derramamiento de su gloria en nuestra generación, cuyo propósito no es otro que el de proclamar el evangelio con unción, poder y autoridad de Dios.
Si consideramos esto como un deseo de toda la iglesia, será válido preguntarnos:
¿Qué es lo que impide la manifestación de este avivamiento?.
I) La iglesia debe reconocer que ha estado dormida.
Al respecto el Apóstol Pablo afirma: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo (Efesios 5:14).
a) La iglesia tiene que reconocer que en realidad no tiene esta vida espiritual que está proclamando. La iglesia tiene que reconocer que se ha dedicado a cumplir con programas humanos, en vez de vivir la vida de Cristo. Estos programas pueden parecer hacia afuera muy solemnes, o muy vivaces y alegres; pero no hay realidad espiritual en ellos. La iglesia tiene que reconocer que ha estado engañada, y engañando a los demás, cuando piensa que sus programas son vida espiritual. Apocalipsis 3:1-3 Yo conozco tus obras, que tienes nombre de que vives, y estás muerto. Sé vigilante, y afirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado tus obras perfectas delante de Dios. Acuérdate, pues, de lo que has recibido y oído; y guárdalo, y arrepiéntete.
b) La Iglesia en su conjunto debe decir y proclamar: “No al conformismo, a la complacencia”. Por el conformismo se han perdido millones de almas, por esta complacencia se han perdido miles de ministerios los cuales han desaparecido.
c) Ha habido una desidia que se reconoce por medio de los siguientes síntomas: Cuando se levantan toda clase de argumentos huecos y vacíos (2ª Cor 10:5), cuando se piensa que todos los demás están mal, todos están equivocados y YO soy el único que tiene la razón… Cuando se observa desprecio hacia los demás, mirando a los hermanos como si el o ella fuese superior, autosuficientes, egoístas, deseosos de ser servidos y de recibir reconocimiento. Defensivos cuando se les critica. Ciegos a su verdadera condición espiritual… ciegos guías de ciegos!!.
II) ¿Cómo revertir esto y obtener un avivamiento personal en nuestras vidas?
a) Es tiempo de comenzar a hablar sobre el VINO NUEVO de Dios (Mat 9:17). Esto es lo que significa un verdadero avivamiento e implica un profundo ARREPENTIMIENTO, porque nadie echa vino nuevo sobre odres viejos, porque estos se rompen !!. Los odres simbolizan las estructuras humanas y el vino representa al Espíritu Santo y la verdad presente. Por eso debemos hacer lo que nos indica la Palabra de Dios cuando dice en el Libro de los Hechos 3:19-21, “Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; a quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo”. El avivamiento vendrá cuando el pueblo de Dios se humille verdaderamente y desee experimentar EL CAMBIO GENUINO. Un cristiano que entra en avivamiento, no está contento con dejar atrás solamente los pecados más obvios (borracheras, robos y engaños, pecados sexuales). Más bien, se examinará a sí mismo para expulsar de su vida aun los pecados ocultos que nadie sabe: las pequeñas "mentiras blancas", la falsedad en los pensamientos, las actitudes de envidia, doble estándar, codicia y malicia hacia otras personas, las fantasías sexuales, el orgullo escondido, la ingratitud e indiferencia hacia Dios, la obediencia solo de labios y no de corazón, la cobardía cuando se trata de testificar o de levantarse por la justicia. A menudo son estos "pequeños" pecados ocultos los que impiden el avivamiento.
b) El refrigerio que Dios desea para su iglesia viene por una vida devocional activa, de adoración y de alabanza. Una Iglesia que adora y alaba tiene en sus manos la llave maestra para abrir los cielos y conseguir el favor de Dios.
c) Debe haber en nosotros un entrañable deseo de servir a Dios, contagiando a otros con nuestro entusiasmo.
d) Amor por las almas perdidas y por los hermanos, lo que se observará en el deseo de compartir la fe con otras personas.
e) Deseo por obedecer a La Palabra de Dios, lo cual se traduce en el rechazo a todo tipo de tradiciones y costumbres humanas que la iglesia ha seguido hasta el momento, para empezar a aplicar solo La Palabra del Señor.
f) Debemos anhelar experimentar un avivamiento, tenemos que desearlo con todo el corazón (Salmo 42 Como el ciervo brama). Juan Wesley preguntó: "¿Tiene Ud. días de ayuno y oración? Asalte el trono de la gracia y persevere allí, y misericordia vendrá de lo alto”.
III) Debemos considerar los principios eternos.
a) Dios no puede vaciar vino nuevo en odres viejos, no puede revelar verdades presentes en estructuras viejas. No puede manifestar su presencia actual en estructuras de ayer. Esto es un principio bíblico universal.
b) Porque Dios es Espíritu y busca adoradores en espíritu y verdad. Esto hay que entenderlo bien, porque cuando hay principios divinos, el hombre debe ajustarse a ellos y no ellos al hombre. Son cuestiones que van directamente relacionadas con la esencia de Dios. (Jn. 4:24).
c) Hay un solo Espíritu Santo, pero muchas operaciones de este, de la misma manera que aunque existe una sola electricidad, existen muchas operaciones de la electricidad. La misma electricidad impulsa tranvías, ilumina nuestras casas, hace funcionar refrigeradores y realiza otras muchas tareas. De igual manera, el mismo Espíritu regenera, santifica, vigoriza y activa, ilumina e imparte dones especiales. El Espíritu regenera la naturaleza humana en la crisis de conversión, y luego, como Espíritu de sanidad dentro del hombre, produce los frutos del Espíritu, los cuales constituyen los rasgos distintivos del carácter cristiano. Se consigue un estado de victoria sobre el pecado y el consiguiente ascenso a un plano de gozo y paz que ha sido denominado a veces “santificación” o “la segunda obra definitiva de la gracia”. (Hch 2:1-4; 1ª Cor.12:1-7 vss).
d) Nadie puede ser lleno del Espíritu Santo, si primero no es quebrantado, nadie puede experimentar la gloria de Dios sin antes humillarse. El apóstol Pedro dice "Humillaos bajo la poderosa mano de Dios, para que el os exalte cuando fuere tiempo” 1ª Pedro 5:6. Cuando Evan Roberts gritó con dolores de parto: «¡Doblégame!», en ese momento dio a luz uno de los avivamientos más extraordinarios que hayan existido, por el que toda una sociedad fue cambiada. Los fraudes desaparecieron, las personas que debían pagaron sus deudas, el comercio empezó a sanarse, las cárceles estaban vacías, asimismo las tabernas y los espectáculos, los negocios empezaron a ser honestos, los traficantes del vicio se convertían o tenían que dejarlo, porque ya no era negocio. (2ª Crón. 7:14-16).
e) La clave para venir delante de la presencia de Dios y recibir su visitación, es la alabanza y la adoración. Pero para alabar al Creador, debemos primeramente humillarnos y despojarnos de nosotros mismos, reconociendo que solo El es digno de recibir toda manifestación que le otorgue toda gloria, honra y poder.
f) Jesucristo, solo él tiene el poder para transformar y reavivar a su iglesia, solo él puede cambiar lo negativo en ganancia, las tinieblas en luz, el odio en amor, el cautiverio en libertad, el fracaso en éxito, la enfermedad en salud, tus debilidades en fortalezas, la maldad en justicia … y hay más, mucho más para los que creen!! .
IV) La búsqueda le corresponde a la Iglesia.
a) No debemos ignorar los dones, observemos lo que dice Pablo en 1ª Cor. 12:1 vss.
b) Seguid el amor; y procurad los dones espirituales 1ª Cor. 14:1 vss.
c) Hacerlo todo para edificación de la iglesia 1ª Cor. 14:26.
d) La historia de los Avivamientos Espirituales nos ha enseñado que en cada Avivamiento este viene acompañado por un fuerte énfasis sobre la PREDICACION DE LA PALABRA.
Conclusión
El propósito de Dios es llenar la tierra con el conocimiento de la gloria de Dios. ¿Cómo lo hará? ¡A través de los avivamientos espirituales en cada nación!.
El Día de Pentecostés marcó el inicio de la Iglesia y de su gran crecimiento: Hch 2:47; 4:4; 5:14; 6:7.
No fue necesario realizar campañas evangelísticas; no tuvieron que gastar dinero en publicidad; ni tuvieron que invitar a sus amigos. Todas estas cosas son buenas y necesarias en el evangelismo normal de la Iglesia. ¡Es nuestra responsabilidad hacerlas! ... PERO, en un Avivamiento Espiritual tal es el sentir de la presencia de Dios y de Su poder, que la gente parece alocarse por venir a los cultos para escuchar la Palabra de Dios.
Amén
Les bendice
Sergio Edo. Contreras Peralta
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